2 julio 2025
5 minutos
Montevideo es una ciudad que se cuenta a través de sus edificios: desde joyas coloniales hasta íconos modernos. Dale play a esta ruta arquitectónica única y descubrí, paso a paso, cómo el alma de la capital uruguaya se revela en cada rincón.
2 julio 2025
5 minutos
En el corazón del casco antiguo de Montevideo se alza el majestuoso Teatro Solís, una joya arquitectónica que ha sido testigo de más de 160 años de historia y arte. Con su imponente fachada neoclásica, columnas dóricas y una cúpula que corona el edificio con elegancia, este teatro no solo deslumbra por su apariencia, sino también por lo que representa: un punto de encuentro cultural donde óperas, conciertos y obras teatrales siguen emocionando a generaciones. Al cruzar sus puertas, uno se transporta en el tiempo, rodeado de salones ornamentados, lámparas de época y una acústica pensada al detalle.
Visitarlo es sumergirse en una experiencia que mezcla patrimonio, emoción y belleza escénica —una parada imperdible para cualquier viajero curioso que quiere sentir el pulso artístico de la ciudad. ¿Querés disfrutarlo sin complicaciones? A tan solo 2,5 kilómetros de distancia, el ibis Montevideo Rambla es el aliado perfecto para tu estadía: moderno, cómodo y con vista al Río de la Plata, es ese punto de partida ideal para quienes quieren explorar la ciudad a su propio ritmo, con todo al alcance y cero estrés.
Si hay un lugar que condensa el sabor, el ritmo y la calidez de Montevideo, ese es el Mercado del Puerto. Este espacio emblemático, abierto desde 1868, mezcla historia y vida cotidiana entre estructuras de hierro fundido, aromas a leña y una energía que contagia desde la primera mirada. Aquí, cada parrilla es un espectáculo, cada plato —sobre todo el asado—, una celebración del paladar.
Pero no todo es comida: entre artesanías locales, música callejera y el ir y venir de los visitantes, el mercado se transforma en un paseo vibrante, ideal para quienes disfrutan de lo auténtico y espontáneo. Es el tipo de lugar que no se recorre apurado —se saborea, se vive y se recuerda.
El Palacio Salvo no solo es uno de los edificios más emblemáticos de Montevideo: es también una obra maestra que desafía los estilos clásicos y se impone con una identidad propia frente a la Plaza Independencia. Diseñado por el arquitecto italiano Mario Palanti e inaugurado en 1928, este rascacielos de inspiración ecléctica —que fusiona elementos góticos, art déco y renacentistas— fue durante años el más alto de América del Sur. Sus detalles arquitectónicos, sus pasillos cargados de historia y las vistas que ofrece desde las alturas lo convierten en una parada imperdible para quienes disfrutan del patrimonio urbano con mirada curiosa.
¿Querés explorarlo sin preocuparte por el traslado o el descanso? El ibis Montevideo Rambla, ubicado a solo 2 km, es la base perfecta para moverte por la ciudad con total libertad: cómodo, moderno y con esa vibra relajada que va con vos, estés viajando por placer o por ganas de descubrir.
Ubicado en el barrio de Punta Carretas, el Castillo Pittamiglio es una joya escondida que intriga desde el primer vistazo. Su fachada angosta, coronada por una réplica de la proa de un barco, ya anticipa lo que espera puertas adentro: un universo de símbolos esotéricos, pasadizos secretos, habitaciones laberínticas y una arquitectura que parece sacada de un libro de alquimia. Construido por el excéntrico arquitecto y alquimista Humberto Pittamiglio, este castillo desafía las lógicas convencionales y estimula la imaginación de quienes se animan a explorarlo. ¿Vas con el chip de lo inusual? Entonces te va a encantar saber que el ibis Styles Montevideo Biarritz queda a solo pasos del castillo. Con diseño vibrante, atmósfera creativa y toda la comodidad que necesitás para seguir tu recorrido por Montevideo, es el aliado ideal para viajeros curiosos y con estilo propio.
En pleno Parque Rodó, rodeado de áreas verdes y a pocos pasos del lago, el Museo Nacional de Artes Visuales invita a sumergirse en el universo del arte uruguayo con una colección que recorre desde los clásicos hasta las expresiones más contemporáneas. Pero no es solo lo que se exhibe lo que cautiva: la ampliación del museo, realizada por el célebre arquitecto Clorindo Testa, le otorgó una nueva dimensión al espacio, integrando luz natural, líneas modernas y una atmósfera que realza la experiencia estética sin robarle protagonismo a las obras. Es una parada esencial para quienes desean conectar con el pulso creativo del país. Y si querés que esa inspiración siga fluyendo al salir del museo, el ibis Styles Montevideo Biarritz, ubicado a solo 1 km, ofrece una experiencia tan singular como el recorrido: diseño original, ambientes cómodos y una energía liviana que hace que cada regreso se sienta como una extensión del paseo.
En el corazón de Villa Dolores, el Parque de la Amistad es ese tipo de lugar que te sorprende por su sencillez encantadora. Pensado especialmente para la inclusión y el juego sin barreras, este espacio público invita a personas de todas las edades y capacidades a compartir, explorar y disfrutar del aire libre con total libertad. Juegos adaptados, senderos accesibles, estaciones interactivas y rincones tranquilos para descansar convierten al parque en un punto de encuentro donde la diversidad se celebra a cada paso. Más que un lugar de recreación, es una invitación a conectar con los demás desde la empatía y el disfrute compartido —ideal para quienes buscan un momento relajado en medio del ritmo urbano.
Entre las laderas del Parque Rodó y con vista directa al Río de la Plata, el Teatro de Verano Ramón Collazo se impone como el gran escenario al aire libre de Montevideo. Con capacidad para más de 4.000 personas, este anfiteatro ha sido —y sigue siendo— el epicentro de algunos de los momentos culturales más vibrantes del país, especialmente durante el carnaval, cuando las murgas llenan de ritmo, sátira y color cada rincón. Su diseño en gradas aprovecha la topografía natural del entorno, creando una acústica envolvente y una atmósfera mágica al caer el sol. Asistir a un espectáculo allí es vivir la cultura local en su forma más festiva y auténtica —una experiencia que permanece en la memoria mucho después del último aplauso.
Ubicado dentro de la imponente Biblioteca Nacional, el Museo de Historia del Arte es uno de esos espacios que invitan a viajar en el tiempo sin salir del centro de Montevideo. Su colección, que abarca desde piezas arqueológicas de civilizaciones antiguas hasta reproducciones de arte clásico y oriental, traza un recorrido fascinante por la expresión humana a lo largo de los siglos. Pero más allá de sus contenidos, el museo también se destaca por su estructura: la renovación de sus salas y áreas expositivas estuvo influenciada por el enfoque innovador del reconocido arquitecto Clorindo Testa, quien supo combinar funcionalidad y lenguaje visual de forma audaz y accesible.
¿Querés seguir descubriendo la ciudad con esa misma mezcla de historia y modernidad? A solo 1 km de distancia, el ibis Montevideo Rambla ofrece la comodidad justa, una ubicación estratégica frente al río y ese ambiente relajado que te permite recargar energías sin perder el ritmo del viaje.
Frente al mar y con líneas que parecen rendir homenaje al horizonte, el Edificio Panamericano es uno de los grandes exponentes de la arquitectura moderna en Montevideo. Construido en la década de 1960, su diseño sobrio y geométrico refleja una etapa de crecimiento urbano marcada por la funcionalidad y la apertura hacia el entorno natural. Con su estructura en bloques, balcones en cascada y ventanales que enmarcan el Río de la Plata, este edificio no solo alberga viviendas: también cuenta historias de una ciudad que miraba al futuro con confianza y estilo. Pasear por la rambla y encontrarse con su silueta es descubrir cómo el paisaje costero se mezcla con la identidad arquitectónica de la capital —una fusión de formas simples, estética cuidada y sentido práctico que sigue inspirando.
Descubrir Montevideo a través de su arquitectura es dejarse llevar por historias que se esconden entre columnas, cúpulas y calles adoquinadas. Para vivir esta experiencia con comodidad, practicidad y sin complicaciones, los hoteles de las marcas ibis te acompañan a cada paso del recorrido. Con ubicaciones estratégicas cerca de los puntos más icónicos de la ciudad, ambientes modernos y ese espíritu relajado que va con vos, son la opción perfecta para descansar, moverse con libertad y aprovechar cada momento al máximo.
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